Conversaciones

jueves, mayo 14, 2009 | |

// Tan sólo había transcurrido un par de minutos antes de darme cuenta lo que había sucedido.
Por mis manos chorreaba sangre y mi traje de corte inglés perfecto empezó arruinarse, el sol siempre tibio me recordó que este tipo de cosas se hacen bajo la luz tenue de la noche, estaba allí de pie observando al infinito mientras el bullicio me conducían al disparate.

30, 40, 60, 90, quizás tan sólo 2 segundos pasaron entre una acción y otra, aunque sólo le sentí partirme el pecho como a un abanico gigantesco que gira sin ningún eje. Ella sonrió, yo me elevé sobre sus cabezas, el despegar me di cuenta a quien realmente buscaban, no era a mi, sino yo a ellos.

6 comentarios:

Unknown dijo...

muy muy bueno.

Anónimo dijo...

Hermano. Estás de vuelta.

Joan Espino dijo...

Leidy: Gracias, un honor.

Jay: Viajamos y viajamos, pero en algún momento debemos regresar a ese punto. un abrazo men

Miztica dijo...

Tanto viaje con tu post que casi no regreso. Muy bueno

Joan Espino dijo...

Hey Miztica, gracias por la visita, que honor!

Gracias por el mensaje, un abrazo.

Anónimo dijo...

buenas tardes:

Solicitamos el uso de la imagen publicada sobre la evolución de hombre, para ser utilizada en un libro de sociales para educación básica secundaria.

Agradecemos su respuesta al correo
colmenaresn@santillana.com.co